La luna de miel





El momento más esperado y deseado de la pareja que se casa.

Un viaje en el que la mayoría aprovecha para darse el homenaje que no se daría en unas vacaciones normales,  ¿y por qué? Muy sencillo, algunos intentan cogerse algunos días más de vacaciones, de los que obligatoriamente da la empresa por casarse y así poder disfrutar de más tiempo fuera, poder ir más lejos o ver más sitios.

Si no eres muy viajero, seguro que hay algún lugar que te apetece explorar y lo tienes en pendientes. Para aquellos que son como Willy Fog, también tendrán sus predilecciones pero igual ya conocen muchas zonas y prefieren ir a relajarse.

Cada vez hay más agencias especializadas en viajes de novios, con paquetes bastante buenos, pero con precios también un poco astronómicos. Aquí tienes dos opciones, o buscarte todo por tu cuenta, o pedir que te lo hagan y pensar solo en lo bien que vas a estar esos días de relax.

A la hora de elegir el destino, es necesario pararse a pensar en que es lo que más os apetece, si estar relajados en una playa con todo incluido, un sitio que sea cultural, más de montaña para los deportistas, un crucero o una mezcla de varios, como por ejemplo, algo cultural con playa para relajarse unos días…


Mucha gente decide casarse en una época del año determinada, para que le coincida una buena estación en el lugar elegido para el viaje de novios, y así asegurarse el buen tiempo y evitar periodos de lluvias. Otra cosa a tener en cuenta son las vacunas que puede requerir la zona elegida y ver con cuánto tiempo de antelación hay que ponérselas.

Además de revisar que el pasaporte esté en regla y rellenar, en caso que sean requeridos, visados u otros papeles que el país en cuestión solicite, hay que mirar si es necesario cambiar moneda y localizar las direcciones y teléfonos de emergencias, consulados o embajadas por si se necesitasen, ojalá que no.

Y a disfrutar!!!!!

Comentarios

Vistas de página en total