De paseo por San Sebastián

Escrito por Arantxa Abecia. Muchas gracias.

                                                                                                                                                                                       Playa de La Concha

Conocida como la Bella Easo, es una de las ciudades más bellas de Europa por sus maravillosas playas: La Concha, Ondarreta y La Zurriola; por su arquitectura señorial de la Belle Epoque; por su amplia gastronomía y su tradición por el “pintxo” y por su gran oferta de ocio y cultura: Festival Internacional de Cine, Semana Grande, Tamborrada, Festival de Jazz, etc.

Por todos es conocida la fama de San Sebastián como un lugar turístico de calidad. De hecho, en 2011, ha sido elegida como el mejor destino de calidad turística de España, siendo visitada cada año por más de 400.000 turistas.  A pesar de su reducido tamaño (tan sólo 183.000 habitantes) y de encontrarse enmarcada entre el mar y la montaña, posee lugares maravillosos.

La Parte Vieja, conocida por sus calles estrechas y rectas, y presidida por el monte Urgull, es centro de la vida social donostiarra con sus incontables bares, restaurantes y sociedades gastronómicas.

Aquí podemos encontrar puntos como el Mercado de “La Bretxa”, centro comercial y de ocio que conserva el mercado tradicional, o la Plaza de la Constitución, situada en el corazón de la Parte Vieja y lugar de celebración de la mayoría de acontecimientos festivos en la ciudad.

Paseando por sus calles, podemos encontrar la Iglesia de San Vicente (la más antigua de la ciudad), la Basílica de Santa María, visitar el recién remodelado Museo de San Telmo, o recorrer el Paseo Nuevo finalizando el recorrido en el Puerto, donde se encuentran el Museo Naval y el Aquarium.

La Basílica de Santa María es una impresionante obra barroca del siglo XVIII que preside la calle Mayor en plena Parte Vieja donostiarra. De ella destaca la fachada barroca de matiz churrigueresco, presidida por una escultura de San Sebastián Mártir y el retablo mayor dedicado a la Virgen del Coro, patrona de la ciudad.

Su puerta principal coincide en línea recta con la entrada a la Catedral de El Buen Pastor.  

En una monumental plazoleta, asomada a la desembocadura del río Urumea, se encuentra el Hotel María Cristina, obra de la brillante Belle Époque, construido en 1912 y lugar de veraneo de la reina María Cristina. Hoy en día, es uno de los epicentros del Festival Internacional de Cine que se celebra cada año durante el mes de septiembre.

Recorrer las tres playas donostiarras (la Zurriola, la Concha y Ondarreta) hasta finalizar en el Peine de los Vientos, es sin duda uno de los mejores paseos de la ciudad.

Desde la playa de la Zurriola, se puede ir contemplando el Palacio de Congresos y Auditorium Kursaal, atravesar por el Boulevard hasta llegar al Ayuntamiento (antiguo casino) y al Real Club Naútico, avanzar por la Bahía de la Concha contemplando el paisaje formado por la isla de Santa Clara, el Monte Urgull y el Monte Igueldo, así como visitar el Palacio de Miramar, antigua residencia de veraneo de la reina María Cristina.

El peine de los vientos

Una vez en la playa de Ondarreta, es de obligación llegar hasta el Peine de los Vientos (famosa obra de Eduardo Chillida) y subir al Monte Igueldo en su antiguo funicular, donde se podrá disfrutar de una vista inigualable de la ciudad.

Además de su oferta gastronómica, San Sebastián ofrece una amplia oferta cultural.

En septiembre la fiesta llega con las Euskal Jaiak que con su amplio programa festivo de deportes rurales y bailes sumerge a la ciudad en una gran celebración popular. Los dos primeros domingos del mes la celebración se completa con La Bandera de la Concha, el principal trofeo de las regatas de traineras del Cantábrico.

En plena playa de la Concha, se encuentra el centro de Talasoterapia La Perla que cuenta con circuitos terapéuticos con el agua marina como principal protagonista. Ideal para relajarse mientras se contempla la bahía de la Concha.

El Parque de Atracciones Monte Igueldo, de principios del siglo XX que se encuentra en la cima del Monte Igueldo. Aunque se puede acceder en coche, la forma ideal de llegar es a bordo de su funicular.

En pleno centro de la ciudad existen numerosos parques por los que disfrutar dando un paseo y contemplando las vistas de la ciudad: Monte Urgull, Palacio de Miramar, Palacio de Aiete, Parque de Cristina Enea, son algunos ejemplos.