Regalo Sorpresa

Recuerdo el segundo aniversario con mi novio, en este caso fui yo la sorprendida. Nos levantamos y me preparó el desayuno, creo recordar que me había comprado hasta napolitana de chocolate, una de mis perdiciones. Después, fuimos a casa de una amiga porque él tenía que coger algo y luego me llevó a un spa. Fue la primera vez que pisaba uno, y claro yo llevaba poco tiempo viviendo en Madrid y no tenía todas mis cosas, así que él había hablado con mis compañeras de piso para que me dejaran varios bañadores/bikinis para ver cuál me valía.

Después de una mañana relajante con masaje incluido, fuimos a comer a casa con sus compañeros de piso y resultó que habían traído los nuevos sofás…. nos pegamos una estupenda siesta en ellos, había que probarlos jeje.

Para rematar el día, me llevó al teatro a ver el Método Gronholm, muy entretenida y recomendable. Fue un día completo y que me gustó muchísimo, prueba de que no hace falta hacer excesivas cosas para sorprender a alguien, solo con comprar unas entradas o hacer una reserva para un spa o un restaurante es suficiente. 

Así que de vez en cuando hay que sorprender a la gente que tienes alrededor, aunque solo sea para borrar una mala semana, para ver una sonrisa en la cara del otro, o por que sí.