Mercado medieval de Chinchón

Fotografía de Nacho Sordo. Gracias, son geniales. 

El pasado sábado, 9 y 10 de febrero, tuvo lugar en Chinchón el mercado medieval que cada año se realiza en el pueblo. Mi curiosidad hizo que me desplazara hasta allí y la verdad que fue un día bastante divertido y entretenido. 

Por un lado nunca había estado en Chinchón, así que fue una buena manera de conocerlo. Una pena que parte del muro, que hay cerca de la iglesia, estuviera en obras porque desde la plaza las vistas quedaban algo más tristonas. 

Según entras en la plaza parece que te transportes al pasado, está muy bien conservada y es muy bonita con todos los balcones verdes y de madera. Las callejuelas con sus empedrados hacen un poco incómodo el caminar pero muy bonito el conjunto. Hay una especie de fuerte en un alto, conservado en parte y que no sé si es visitable por dentro, no tenía mucha pinta, pero con unas increíbles vistas del pueblo y de las 4 torres de Madrid que se ven en la distancia. A pesar que amenazaba lluvia al final se quedó un bonito día con sol que siempre hace que las ciudades se vean de otra manera.

El mercado medieval, que yo imaginaba algo más grande, estuvo muy bien, puestos de comida, de quesos, de pan, de especias y tés, alguno de cuero, un herrero con demostración incluida, puestos de jabones, de licores, de artesanía, y uno que me llamó mucho la atención, eran bolsos, cinturones, carteras, pulseras hechas a mano con cámaras de neumáticos de bicicletas y camiones, otros hechos con cintas de medir o incluso con cremalleras, todo muy original.

También tienen juegos para los niños, y los no tan niños, que pueden entretener un buen rato y pasarlo igual de bien sin tener que estar mirando una pantalla matando marcianitos, y paseos en burro.

Por la tarde hubo un espectáculo de cetrería y la verdad que los animales son increíbles, que tranquilos pueden estar a veces cuando en libertad tienen ese instinto animal que necesitan para sobrevivir; y un paseo de los reyes católicos por el pueblo.

La verdad que lo tienen bien montado y que merece la pena ir. Es una pena que en el mercado no hubiera más puestos con comida, solo había dos opciones uno que solo ofrecía sopas de ajo y otro en el que podías comprar empanada. Para comer hay muchos sitios, pero nosotros recaímos en La Recua del Pelicano, ya que en trip advisor lo habían puesto muy bien, y no se equivocan. Escogimos un menú degustación para 2 personas, y la verdad que comes bien y a buen precio. Un sitio muy recomendable. El trato espectacular, lo único es que es pequeñito y nosotros llegamos justo a la hora adecuada, porque además había una reserva de un grupo grande y solo quedaba nuestra mesa libre en el comedor.