Ruta por Galicia (parte 4)

Aparte de los faros que vimos en el pasado post, también hay varios pueblos increíbles en esta zona que merecen una visita.

Muxía, un pequeño pueblo costero, muy conocido por la romería de la Virxe da Barca que se celebra en septiembre. Cerca se encuentran las Caldeiras do río Castro, unas piscinas naturales pequeñas que forman diminutas cascadas. 

En Vimianzo podemos visitar el Castillo, abierto de martes a domingo, entrada gratuita. Aparte de recorrer el castillo y descubrir su historia y los enfrentamientos entre la mitra compostelana, la nobleza, los campesinos y los hidalgos, se puede ver artesanía en vivo (las artesanas del lino y los encajes están en el horario indicado, el resto solo los fines de semana, verano y semana santa). 

Noia, declarado Bien de Interés Cultural en 1985, tiene un casco viejo anclado en el medievo. Impresionantes pazos y casonas de piedra que ver mientras te pierdes por sus calles. En la iglesia gótica de Santa María a Nova, podemos ver el museo de lápidas funerarias más importantes de Europa. 

La iglesia de San Martiño, en la Praza do Tapal, también llamará tu atención ya que no está terminada, solamente tiene una torre, acabó de construirse en 1434 pero por alguna razón, que no se conoce, se edificó solo con una torre. 

Muros, cuenta con un paseo marítimo que recorre casi todo el pueblo. Su casco histórico se declaró Conjunto Histórico-Artístico en 1970. Lo ideal es perderse por sus pequeñas callejuelas empedradas para descubrir todas las casas de piedra y las pequeñas plazas que esconde. 

Y muy cerca de Muros, no podéis perderos la Cascada de Ézaro. El Xallas es el único río europeo que desemboca directamente en el mar en forma de cascada. Merece la pena la visita. Nosotros fuimos a primera hora y no nos encontramos con casi nadie. Puedes aparcar fácilmente y luego es un pequeño paseo por una pasarela muy cómodo.