De Paseo por los fiordos Noruegos II


Kinsarvik y Eidfjord son dos pequeños pueblos en el fiordo Sorfjorden con mucha paz y tranquilidad. De camino entre uno y otro hay bonitas vistas del fiordo y tienen muchos puntos para poder parar y sacar fotos, contemplar el paisaje…



El tiempo aquí cambia rápidamente, aunque el día amanezca con mucha niebla si esperas unas horas es posible que salga el sol, se vaya la niebla y tengas un buen día para hacer alguna excursión. 


Desde Kinsarvik puedes hacer varias rutas en el valle Husedalen y ver 4 cascadas durante el paseo. El coche se puede dejar en un parking que hay y comenzar andar junto al río. Es un camino tranquilo y bonito, vas todo el rato por camino de tierra, muy cómodo. Al final del camino te encontrarás con la primera cascada Tveitafossen junto a una central eléctrica.





Puedes subir por el camino empinado junto al tubo de agua canalizada, o por un camino de tierra que hay un poquito antes de llegar a la cascada, el cual está cerrado para los vehículos. Cuando llegas a la parte alta de la cascada el camino se adentra en el bosque (cuidado si ha llovido hay muchas piedras que pueden resbalar, agua y barro) y verás a tu derecha la segunda cascada Nyastølsfosse



Es espectacular para mí de las más bonitas de las que vimos durante el paseo. Desde el camino verás un pequeño apartado, tipo mirador, donde podrás parar, tirar alguna foto, descansar, comer algo...

Si sigues el camino, que durante un rato va paralelo a la cascada, oyendo el sonido del agua, llegarás a la tercera cascada NykkjesøyfossenHay un punto antes de llegar a la tercera que se ve la cuarta cascada Søtefossen nosotros no llegamos hasta allí.






Al pie de la tercera cascada hay un pequeño claro para parar a descansar, comer o pasar la tarde tranquilamente. 



No es una ruta muy complicada y aunque en el mapa pone que a la primera se tarda 1 hora de ida, en realidad se hace en menos tiempo. Hasta la tercera cascada más o menos unas 4/5 i/v y vas casi todo el rato entre árboles y muy cerca del río, la verdad es que merece la pena. Nosotros íbamos pensando que el tiempo (nublado, lluvia…) no íbamos a poder hacer nada pero al final el día cambió, la niebla se fue y hasta vimos el sol.


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