Despedidas de Soltera

El primer finde de abril fue mi despedida y tengo que reconocer que no me lo esperaba, no me había enterado de nada. Lo hicieron muy bien. Tuve el gusto de compartirla con una gran amiga, Ester que se casa también este año y nuestras amigas en común decidieron hacérnosla a la dos a la vez, muy divertido.

Llegué a mi casa el viernes y en el buzón había un sobre que me indicaba que mirara el contenido, y lo que había era un pen drive con un vídeo en el que me decían que había llegado mi día y que metiera una serie de cosas en una maleta que venían a por mí. Estaba en estado de shock, no  me lo podía creer. Hice la maleta en tiempo record, no creo que haya hecho ninguna tan rápido ni con tan mal criterio, porque qué difícil es hacer una maleta sin saber a dónde vas, ni lo que vas hacer, casi no me cerraba.

Y otra cosa en la que tampoco había caído, lo largo que se hacen los viajes si no sabes a dónde vas. Tras pasar por varios sitios fui descartando ciudades hasta que llegamos a Valladolid, el tiempo no acompañaba pero ya se intuía un buen finde.

El viernes fue tranquilo, cenita en un sitio muy chulo, me encantaría poder deciros el nombre, pero no tengo ni idea. Me considero una persona atenta y que se fija en las cosas, pero ese finde estaba como en una nube y la verdad que si me hubieran dejado sola no hubiera sabido ni llegar al hotel.

El sábado ya cambió la cosa, nos pusieron una camiseta que ponía “lo siento chicos está atracción ha cerrado” con un dibujo de una montaña rusa. Y además, remataron el look con una gran pajarita de lentejuelas y unas antenas que tenían una foto de nuestros respectivos (ya os podéis imaginar que no habían escogido una en la que salían de portada de revista) y así fuimos todo el día y la noche. Estábamos ideales, jajaja.

Por la tarde fuimos a bailar burlesque, muy divertido. El sitio se llama Farah Diva y la verdad que la chica que estuvo enseñándonos era muy maja y nos reímos un montón. Además, después de enseñarnos unos pasos y hacer una mini coreografía nos estuvo sacando fotos, mientras ella nos indicaba cómo ponernos.

A la noche fuimos a cenar y aquí empezaron los mini juegos… el primero consistía en ver cuánto nos conocíamos entre todas. Nuestras amigas nos hacían preguntas y si acertabas había premio y si no castigo. El segundo mini juego eran también preguntas pero esta vez las habían respondido nuestros novios. Nos reímos un montón, y es que entre los momentos que has pasado con tus amigas y las preguntas que te hacen… y cómo no las respuestas de ellos no tienen desperdicio.

El resto de la noche también fue divertido, nos volvimos a encontrar algún grupo que también estaba de despedida y que habíamos visto por la mañana. El domingo después de picar algo tocaba vuelta a casa.

Un gran finde, pero qué rápido pasó. Muchas gracias chicas, estuvo genial, ¿cuándo repetimos? Jejeje.