De Paseo por Oslo

No es una ciudad muy grande por lo que en un par de días es factible conocerla. 

El primer día podéis comenzar el paseo por la Ópera, un edificio blanco, con un diseño moderno que permite subir y caminar por el tejado mientras disfrutas de las vistas de la ciudad. 

El paseo nos lleva siguiendo la costa del fiordo hasta Akershus, la fortaleza y castillo. Se puede pasear por sus jardines y visitar el castillo. 

Bajando de Akershus y cruzando el parque llegas al Centro Nobel convertido en museo donde ver la vida de Alfred Nobel y los premiados. Cerca se encuentra el Akerbrygge, que es la zona del puerto que cuenta con un montón de restaurantes, zona comercial llena de vida a todas horas. Con un día bueno es un lugar ideal para descansar en la cantidad de bancos que tienen mirando a la fortaleza. 

Subiendo del Akerrbrygge hacia el Ayuntamiento, podemos llegar a la plaza donde se encuentra el Teatro, la universidad y al fondo el Parlamento. 

Cualquiera de las callejuelas que hay cerca del Parlamento será un buen lugar para continuar tu paseo. Cogiendo una de las calles de la derecha del Parlamento llegarás a la catedral de Oslo, en esta placita todos los días tienen un mercado de flores. Bajando la calle llegarás hasta la estación central y donde se encuentra el punto de información. 

Y si subes desde el parlamento, dejando la universidad a la derecha y el teatro a la izquierda llegarás al Palacio Real y sus jardines. 

El segundo día, puedes coger un barco e ir a Bygdøy, la isla de los museos, donde podrás ver el museo Kon Tiki, Fram y el museo del pueblo Noruego… 

Desde allí podrás ir andando hasta el parque Vigeland, pasando por una zona menos urbanizada, pasando por una gran granja y volviendo otra vez a ver el agua del fiordo. Después irás paseando por una zona más residencial de la ciudad con casas espectaculares y donde están situadas muchas embajadas. El Parque Vigeland es un gran parque con muchas zonas verdes lleno de las estatuas que realizó a lo largo de su vida Gustav Vigeland. 

Por la tarde puedes visitar alguno de los museos de la ciudad como por ejemplo el museo Munch, Museo Nacional de Ciencia y Tecnología, Museo Folclórico Noruego, Museo Marítimo Noruego….

También una zona muy animada para visitar si quieres tomarte algo o comer, es Mathallen, una zona que han renovado y acondicionado tipo mercado, con puestos para comprar o para comer y tomarte algo. 

Si ya cuentas con algún día más puedes acercarte a ver el trampolín de los saltos de esquí o algún pueblo cercano, o incluso coger alguno de los barcos que ofrecen viajes por el fiordo de Oslo.